El "pardaler". Este personaje se hizo popularísimo en las primeras décadas del siglo XX. Vendía pajaritos por la Plaza Redonda, y su cancioncilla la conocía todo el mundo: ¡dos pardalets i una aguileta, d´eixes que van en bicicleta, xiquets ploreu que pardalets tindreu,, xiquets ploreu que pardalets tindreu!.